04 febrero 2009

Los comerciales y los centros educativos

Son un eslabón más en la cadena de venta del libro. Los representantes de las editoriales están, como todo el sector, expectantes.... ¿será rentable en un futuro muy cercano la figura del comercial? ¿podrán algunas editoriales mantener una plantilla de comerciales sin el libro texto?

De momento, con la más que previsible desaparición de los libros de texto, creo que desaparecerán también los promotores para centros educativos..... ¡¡MENOS MAL!!.... algunos profesores creen que el peloteo vil y abyecto (regalos, libros gratis, descuentos especiales, etc.) que estos comerciales en su mayoría practican es lo habitual, y creen que todos vamos a hacer lo mismo. El decir que no a algunas "peticiones" nos ha costado varias broncas importantes.

(Por cierto, la última vez que lo hemos vivido ha sido hoy mismo. Una profesora de un centro a la que no conocemos absolutamente de nada -se ha presentado como jefa de departamento- pretendía llevarse a cargo del centro, sin abonar, unos libros. Ante nuestra negativa se ha ido mosqueada diciéndonos que no le parecía bien...)


(La semana pasada otro centro quería que les llevasemos nuestras actividades de fomento de la lectura sin habernos comprado ni un libro de bolsillo, aunque tenían una dotación económica para la biblioteca.... pero es que la responsable todavía me discutía el que le dijera que no)

Que conste que no digo que sean todos los docentes..... son ALGUNOS que indignan hasta a sus compañeros. Como en todos los colectivos hay también personas -por suerte, la mayoría- con las que es un placer trabajar.

Puedo afinar más.... lo de los privilegios obligatorios me lo he encontrado la mayoría de las veces en profesores del departamento de lengua. Supongo que será por que los comerciales les "miman" más por lo de las lecturas para los alumnos.

Como veo que el tema da para mucho, CONTINUARÁ....

1 comentario:

Don Erre dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con lo que cuenta usted. Aunque el que vende en grandes cantidades es quizá el responsable de este "vicio docentil".
Creo que todo esto viene de la venta de libros como si fueran medicamentos por parte de las farmacéut... digo de la editoriales. Es una especie de soborno para que elijas cierta editorial para, por ejemplo, la asignatura de música para todo un ciclo educativo. A cambio de un portátil, un proyector y una pantalla, sin fijarte si los tus criterios como educador coinciden con los de la editorial. Pongo la mano en el fuego si relacionamos "regalo importante" con libros de pésima calidad educativa y contenidos huecos. Sumemos los cambios de leyes educativas y adaptaciones a Comunidades y ahí tenemos libros nuevos: a ver quién ofrece más.