22 noviembre 2009

Larousse y las librerías

Entre tanto menosprecio a las librerías por parte de las editoriales, entre tanta competencia desleal e inmoral como nos hacen, todavía hay alguna que otra que nos aprecia y lo demuestra:



Larousse ha lanzado este desplegable como catálogo-selección para estas navidades, específicamente para librerías. Es muy de agradecer.


Esta entrada viene al caso porque hace poco una editorial pequeña e independiente, de las que la práctica totalidad de sus ventas se realizan a través de librerías, de las que tienen un catálogo hecho con mimo, de las que hacen que las librerías podamos ser algo más que sitios para despachar libros, ha lanzado su nuevo servicio de venta desde su web anunciándolo como "más eficiente, más fácil y de una forma totalmente segura para el comprador".


Es un desprecio a nuestro trabajo que ha levantado ampollas. La editorial, cuando se ha enterado, ha retirado la venta desde su web, pero (por lo menos para mí) ha quedado clara cual es su visión de las librerías: un intermediario molesto entre la editorial y el usuario final.

1 comentario:

Fernando Alcalá dijo...

No lo entiendo. Bueno, sí lo entiendo y es una pena. Hay una diferencia muy grande entre los que compran libros y los que leen libros.

Los que los compran, no suelen comprárselos a sí mismos. Les da igual dónde hacerlo.

Los que los leen, van a librerías.

Pero es que también son los que buscan libros por Internet.

Es decir, que son la misma persona. Por tanto, no comprendo esa disociación porque, en definitiva, el target de la mayoría de editoriales (las que no venden en Carrefour, vamos) está formado por las personas que van a las librerías.

Por tanto, deberían cuidar a ambos con mimo. ¿no?

Ánimo!