Leo con los ojos como platos el artículo que aparece en el diario Público:
Por si no les apetece leerlo, cuenta cómo algunas universidades españolas están alojando en sus paraninfos cursos de temas tan científicos como homeopatía, acupuntura, grafología para la selección de personal, astrología....
Si quieren más información, visiten el blog La lista de la vergüenza
De todas maneras, esto no es nuevo. También se da en la rama de humanidades, donde los revisionistas campan a sus anchas sembrando doctrina ultraconservadora e ilógica desde la cátedra.
Hace ahora poco más de un año, el profesor universitario Luís García Montero dejó su cátedra por voluntad propia como consecuencia de una condena judicial, por injurias a un profesor revisionista, que se atrincheró en su puesto endogámico para decir lo que le vino en gana acerca de García Lorca.
¿Ustedes creen que la libertad de cátedra está en buenas manos? ¿Creen que pasará mucho tiempo antes de que impartan asignaturas de creacionismo?
2 comentarios:
Endogámicos son todos los puestos en la universidad española, ya enseñen allí revisionistas o inmovilistas (vaya, que eso resulta independiente de la orientación ideológica del profesor). O sea, que con seguridad también ese calificativo sería aplicable a la cátedra que desempeñaba el señor García Montero.
Coincido en que la Universidad española tiene muy poco que criticar, en particular si no es un ejercicio de autocrítica. La quiropráctica, como ejemplo, además de otras actuaciones médicas que se escapan de la farmacocracia y el abuso de la medicina 'convencional' , no deberían incluirse en determinados sacos. Ya se persiguieron y juzgaron en su día avances médicos calificados por entonces de "peligrosos". Y la 'ciencia' otorgó el Nobel a peligros como el lisboeta Egas Moniz, ¡por sus lobotomías! Primero sacamos la viga y luego miramos la paja, propongo. Salud
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